por Alan Durston
Las asociaciones cuya vida documentamos en esta plataforma digital fueron formadas por y para personas residentes en Lima que provenían de otras partes del Perú. Se las ha llamado “sociedades regionales”, “instituciones provincianas” etc., pero creemos que es más claro hablar de “asociaciones de migrantes”. Cada asociación representaba a los migrantes de una zona específica, grande o pequeña: departamento, provincia, distrito o pueblo. Perseguían fines de apoyo mutuo, organizaban actividades de diversa índole para sus miembros y abogaban por la zona de origen. Estas organizaciones han sido analizadas por antropólogos y sociólogos con referencia a épocas recientes (años 1960 en adelante)—por ejemplo, los libros de Teófilo Altamirano (1984 y 2000)—. Su desarrollo anterior es poco conocido. Para comenzar a llenar el vacío hemos construido una base de datos a partir de más de 6.500 avisos publicados por alrededor de 490 asociaciones de migrantes en El Comercio de Lima, el principal diario del país, entre 1906 y 1933.
¿Cuándo comenzaron a aparecer estas instituciones? Sin negar que hayan existido asociaciones de migrantes en Lima en el siglo XIX, las evidencias que hemos encontrado apuntan al temprano siglo XX. La guía de Lima de Cipriano A. Laos, publicada en 1928, registra los años de fundación de 48 “sociedades regionales”. Solo una, la Sociedad Humanitaria Hijos del Misti (una asociación arequipeña) se estableció antes de 1911 (en 1902), y la mayoría se habían creado durante los años 1920, es decir, bajo el régimen de Augusto B. Leguía (Jansen 2017: 67). El primer ejemplo claro de un aviso de una asociación de migrantes que hemos encontrado en El Comercio es del 2 de agosto de 1906. Anuncia una reunión convocada por estudiantes universitarios del departamento de Ancash para establecer la Sociedad Hijos de Ancash, e invita a los demás ancashinos residentes en Lima a integrarla. La asociación provincial más antigua parece ser la Sociedad Progreso de Aymaraes, establecida en 1909 para representar a los migrantes de la provincia de Aymaraes (departamento de Apurimac). Las asociaciones distritales comienzan a anunciar reuniones en El Comercio a principios de la década de 1910 y se vuelven muy activas en la década de 1920. Evidentemente, el florecimiento de las asociaciones de migrantes estuvo ligado a una aceleración de la migración interna fomentada por un rápido crecimiento económico y de la infraestructura vial durante las primeras tres décadas del siglo. En 1931, migrantes internos principalmente de la sierra central y sur constituían casi el 40% de la población de Lima de 376.000; 65.000 llegaron durante la década de 1920 (Stein 1980: 56, 65).
La mayoría de los avisos de El Comercio que conforman nuestra base de datos anunciaban reuniones o informaban sobre los resultados de reuniones pasadas (la elección de una nueva directiva, resoluciones aprobadas, etc.) Uno de los aspectos más interesantes de los anuncios es la información que ofrecen sobre los lugares de reunión: algunas asociaciones tuvieron locales propios pero la mayoría utilizaban los locales de las federaciones de obreros y artesanos, en particular la Confederación de Artesanos “Unión Universal”, cuya sede estaba en la primera cuadra de Jirón Ayacucho (antigua calle Tigre), y la Asamblea de Sociedades Unidas, en Jirón Santa Rosa cerca de la Avenida Abancay y el antiguo local del Palacio de Justicia (donde hoy está la Fiscalía de la Nación).
Nuestra base de datos identifica alrededor de 490 instituciones (ver Metodología y guía del usuario). La gran mayoría acogían en principio a todos los naturales del departamento, provincia, distrito o poblado en cuestión que vivían en Lima (a menudo se agregaba también Callao y “balnearios”–Miraflores, Barranco y Chorrillos) y perseguían fines generales relacionados con el bienestar de los miembros y de la patria chica. Existieron también asociaciones para grupos sociales específicos, como obreros o estudiantes universitarios, provenientes del mismo departamento o provincia. Otra categoría son las asociaciones confederadas, cuyos miembros eran delegados de otras asociaciones: por ejemplo, el Centro Junín Confederado estaba formado por asociaciones que representaban migrantes de las provincias y distritos del departamento de Junín. En 1931, para la contienda electoral entre Luis Miguel Sánchez Cerro y el Partido Aprista Peruano, liderado por Víctor Raúl Haya de la Torre, se formaron clubes electorales que hemos incluido en la base de datos porque siguieron el mismo principio organizativo de las asociaciones de migrantes: agrupaban a los naturales de un departamento, provincia o distrito residentes en Lima. Los clubes de migrantes apristas casi no aparecen en nuestra base de datos debido a la postura anti-aprista de El Comercio, pero sí abundan los clubes sanchezcerristas. También hemos incluido asociaciones que perseguían objetivos específicos para la patria chica, como la distritalización de un pueblo o la construcción de un puente.
La mayoría de las asociaciones se declaraban apolíticas y ajenas a todo interés partidario. Sin embargo, el gráfico que muestra el número de avisos por año sugiere que la actividad de las asociaciones aumentaba en los momentos de apertura política. Por ejemplo, hubo un aumento notable (también reflejado en la aparición de nuevas asociaciones) a principios de los años 1920, cuando el régimen de Leguía buscó aliarse con los movimientos reformistas para mejor controlarlos. El número de artículos decae a mediados y fines de la década, durante la etapa más represiva del régimen, y salta tras su caída en agosto de 1930, cuando muchas asociaciones manifestaron su apoyo a la revolución de Sánchez Cerro y denunciaron los abusos del leguiísmo. La correlación requiere mayor sustento y análisis, pero es sugestiva en cuanto al potencial de la base de datos para mostrar nuevas pautas de investigación.
Un comentario final sobre la procedencia geográfica de las asociaciones: aunque nuestro proyecto enfoca los migrantes de origen andino o serrano, la base de datos incluye todos los anuncios que encontramos en El Comercio que fueron publicados por asociaciones de migrantes, incluyendo las que representaban migrantes de la costa y del oriente amazónico. Como podemos ver en los mapas que muestran el número de asociaciones por departamento y por provincia, la actividad asociativa se concentraba entre los migrantes de la sierra, principalmente Ancash, Junín y Ayacucho, y de provincias específicas al interior de esos departamentos. Uno de nuestros objetivos a futuro es estudiar los factores que determinaron los niveles de actividad asociativa mas allá del número de migrantes presentes en Lima.
Bibliografía
Altamirano, Teófilo. 1984. Presencia andina en Lima Metropolitana: Un estudio sobre migrantes y clubes de provincianos. Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú.
Altamirano, Teófilo. 2000. Liderazgo y organizaciones de provincianos en Lima Metropolitana. Culturas de migrantes e imaginarios sobre el desarrollo. Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú.
Jansen, Robert S. 2017. Revolutionizing repertoires: the rise of populist mobilization in Peru. Chicago, University of Chicago Press.
Laos, Cipriano A. 1928. Lima: ‘La ciudad de los virreyes.’ Bajo el alto patronato del Touring Club peruano, 1928-1929. Lima, Editorial Perú.
Stein, Steve. 1980. Populism in Peru: The Emergence of the Masses and the Politics of Social Control. Madison, University of Wisconsin Press.